Censura


  • Artistas que reivindican 2.0

    Con la anterior entrada de «artistas que reivindican» se me quedó muy corto para todos los artistas que existen y que buscan marcar una diferencia en la sociedad. Por lo tanto, en esta segunda parte se han expuesto otros tantos como:

    Alvida Biström https://www.instagram.com/arvidabystrom/?hl=es

    Esmay Wagemans https://www.instagram.com/esmaywagemans/?hl=es

    Cao Kaal https://www.instagram.com/cao_kaal/?hl=es

    Aarti Olivia Dubey https://www.instagram.com/curvesbecomeher/?hl=es

    Tratan diferentes temas como la transfobia en los cuerpos, la censura y la gordofobia.

  • ¿De verdad conoces Instagram?

    Es común el uso de Instagram sin conocer verdaderamente a quien le das tus datos, quien los controla, quien decide que hacer con tus publicaciones, que está bien publicar o que no, etc y no nos importa. Lo seguimos usando diariamente.

    Para saber los conocimientos de personas de nuestra edad (entre 18-25 años), que son las que más utilizan las redes sociales en su día a día, he realizado un estudio en el que han participado 55 personas, tanto mujeres como hombres. Si que se ha podido ver la interacción de más mujeres (45) que hombre (10), pero esto ha ayudado también a conocer los problemas que han tenido a la hora de subir publicaciones enseñando su cuerpo.

    La primera pregunta que realicé fue si alguna vez habían eliminado alguna de sus publicaciones por ser «inapropiada» o por «actividad sexual» y en este caso 4 de 55 personas respondieron que sí, tres mujeres y un hombre. Dos de las publicaciones fue debido a que llevaban bañador o bikini, otra debido a una fotografía artística donde se enseñaba la parte baja del pecho femenino sin mostrar los pezones, la misma chica también comentó que también le censuraron parte de un corto de Agnes Varda «nuestro cuerpo, nuestro sexo». Y por último, fue un caso por transfobia donde un chico subió una publicación de «his name is Alex» y se la eliminaron. Esta última la pudo recuperar pero de las otras publicaciones no se supo nada más.

    Por otra parte, más de la mitad de las personas que utilizaban instagram no conocían la existencia de los algoritmos sobre la censura. De de ese 40% que sí que lo sabía, un 34.5% conocía el algoritmo que ayuda a aumentar la visibilidad de las publicaciones según la cantidad de ropa que se lleve y el 36,4% conocía la existencia del algoritmo que calcula el porcentaje de ropa que llevas y según su cantidad puede censurarte o no.

    En cuanto a la existencia de casos homófobos, racistas o gordófobos, de la que menos se conocía era sobre la gordofobia, menos de la mitad. Después le seguía la homofobia con un 54, 5% y por último, la que más eco había generado entre la gente era sobre racismo. Es posible que esta alta comprensión sobre casos racistas sea debido al caso «blacklivesmatter», un hashtag muy activo durante todo 2020.

    Algo llamativo en la siguiente pregunta, que era si habían ayudado ante alguna de estas injusticias y fue la respuesta más positiva con un 62,2%, que conocía algún caso y que había ayudado en la causa. Como sociedad las personas cada vez se deconstruyen más y tiene la mente más abierta, esto hace que la voz de las minorías poco a poco sea más alta y visible.

    Por último, pregunté si tras saber de estos casos de odio serían capaces de dejar de utilizar la red social Instagram. Hubo respuestas muy variadas, el 46,2% dijo que sí mientras que el 53,8% dijo que no, pero dentro de este NO explicaron su respuesta y dieron alternativas para no dejar de utilizarla pero en contraposición, que fuese una herramienta para reivindicar, uniéndonos todos para un cambio global, aunque es verdad que eso supondría una utopía. Otros muchos simplemente dijeron que no podrían dejar de utilizarla ya que es una distracción y entretenimiento, pero ¿hasta que punto eso es bueno?. Como uno de los usuarios que realizaron la encuesta, ha expresado que es una red social que puede llegar a crear ansiedad en las personas y con la nueva actualización de compra busca ejercer un mayor consumismo. Esto es cierto, la que muchas veces esta red hace que las personas se comparen entre sí y generen ansiedad entre la población de jóvenes por no sentirse a gusto con su cuerpo.

    Sigue habiendo mucha desinformación sobre como nos controlan en las redes sociales. Además, también hay un gran desinterés por informarnos incluso con algo que utilizamos cada día como es Instagram. Después de realizar esta encuesta mucha gente ha comentado que no tenía ni idea de lo que pasaba y que después de esto se informará más. Una forma de poder solucionar esta situación sería con la manifestación, como anteriormente se ha mencionado. La reivindicación de la gente uniéndose por una misma causa, pero es algo imposible, existe demasiada gente que utiliza Instagram como una herramienta de trabajo para poder vivir y no podría dejar de utilizarla o ir en su contra ya que no sería beneficioso. Aunque no se pueda reivindicar de una forma global, se puede empezar con poco, casos pequeños, hasta que al final estos casos pequeños se vayan sumando a unos mayores y así dar visibilidad y reconocimiento.

  • No solo el desnudo es censurable

    Además de eliminar publicaciones por inapropiadas debido a los “desnudos”, Instagram también se le conoce por algunos incidentes más con la homofobia, el racismo y la gordofobia.

    Para ir en orden cronológico nos remontaremos a 2017, cuando una pareja de chicas, Jana y Verónica o también llamadas Oh Mami Blue (@oh.mamiblue), subieron una fotografía tumbadas en la cama con su hijo al lado e Instagram censura la fotografía por “inapropiada”. Ambas, muy activas con su cuenta de Instagram en la lucha contra la LGTBofobia, quisieron denunciar este ataque que atentaba contra sus derechos. La eliminación de esta publicación se debió a la denuncia de muchos usuarios con la excusa de “spam”, debido a esta inmensa avalancha de gente Instagram decidió eliminarla. Oh Mami Blue no se quedaron con los brazos cruzados y decidieron denunciarlo por sus stories utilizando el hashtag #Yosoloveoamor y #BorralGHomófobos.

    Publicación censurada de Oh Mami!

    Al cabo de un tiempo se hizo tal eco que Instagram se disculpó ante ellas comentando que ellos trabajaban muy duro para encontrar el equilibrio para que todo usuario se sintiese cómodo con la red social y que se habían equivocado al eliminar esa publicación. Por una parte, estuvo bien la disculpa que recibieron, pero esto da que pensar como Verónica comentaba: «Entendemos que la gente denuncie y esta sea la respuesta inmediata de Instagram, pero tiene que haber alguien detrás que diga ‘esto sí, esto no’. Estoy segura de que la plataforma se puede permitir que haya gente trabajando exclusivamente en eso. Esto es un delito. La homofobia está penada y es algo que no se puede consentir».

    Tras este incidente, en 2018, saltaron las alarmas homófobas de nuevo. Esta vez fue en Madrid donde Instagram censuró una publicación de dos chicos besándose por “inapropiada” y por “atentar contra los derechos comunitarios”. Álvaro y su novio, las víctimas de este caso estaban dando una vuelta por la calle y decidieron hacerse una foto besándose y subirla a Instagram. Poco tiempo después, Instagram la eliminó y Álvaro decidió denunciarla por las redes sociales sumándosele a la causa muchos influencer y personas conocidas como Toñi Moreno, la cual expuso en sus redes sociales la indignación que sentía y diciendo que:

    “El amarse hasta las trancas es para lo único que estamos hechos”.

    Finalmente, Instagram decidió desbloquear la publicación.

    No solo ha habido casos homófobos sino también gordófobos, este mismo año Instagram dio de baja la cuenta de Corina Lagos (@gordainsurrecta5.0), una modelo plus sizes, que estaba haciendo una campaña para visibilizar la gordofobia que existía. Esta modelo argentina se sorprendió ante esta reacción ya que no estaba enseñando ningún desnudo, solo un cuerpo diferente a los típicos que salen delgados. La plataforma comentó que se había dado de baja la cuenta debido a las denuncias que les llegaron de otros usuarios por “Violación de normas de uso”, algo incoherente y que suponía un delito de odio. Corina contactó con Instagram y aunque no tuvo respuestas después de un tiempo rectificó y le activaron otra vez la cuenta. Tras este suceso Corina Lagos compartió sus pensamientos y lanzó un mensaje a todas esas personas que pueden sentirse como ella:

    Hoy con 27 años puedo pararme y pelear contra el monstruo mayor que es tan invisible que seguimos sin verlo. Pero está en cada publicidad, cada médico patologizante, cada producto dietario, cada culpa que sentimos con cada bocado». «Es cuestión de encontrarlo adentro y matarlo afuera. Porque sin gordxs visibles el mundo sigue siendo el mismo y nuestras grasas son para siempre el asco de toda la sociedad silenciada y patologizadora.

    Publicación donde lo explica todo

    Posterior a esto, Instagram no solo atacó a las personas plus sizes sino que lo juntó con racismo, en este caso, las víctimas fueron Nyome Nicholas-Williams (@curvynyome), una modelo afroamericana y la fotógrafa que realizó la sesión de fotos de Nyome, Alexandra Cameron este mismo año 2020. Ambas sufrieron la discriminación del algoritmo de Instagram cuando horas después de publicar una fotografía de la modelo, Instagram la censuró por “desnudez” y “actividad sexual” y además insinuó a la fotógrafa que su cuenta podría cerrarse. Cameron ante este suceso expresó que llevaba muchos años realizando sesiones fotográficas a otras mujeres, pero en este caso eran blancas, delgadas y con mucha menos ropa y con ellas nunca le había pasado esto. ¿Cuál es la diferencia entonces para que una sea censurada y las demás no?

    Por otra parte, Nyome, también salió a denunciar esta situación, comentó los trastornos alimenticios que había sufrido desde pequeña y que ahora mismo se encontraba en un momento de su vida en la que por fin podía amarse y nada en el mundo podría hacerla caer. Además, se lanzó una campaña llamada #IwantToSeeNyome donde se explicaba que el algoritmo de Instagram seguía teniendo problemas raciales y contra la censura injustificada.

    Video explicando lo sucedido

    Finalmente, el director ejecutivo de la plataforma Instagram, reconoció que el algoritmo seguía teniendo fallos y que estaba al tanto de todas aquellas voces que buscaban un cambio a favor de la igualdad y la libertad. Esto podría ser un gran paso para mejorar la política de censura.

    Estas denuncias se han hecho virales y las hemos podido conocer, pero existe muchas otras personas que seguramente hayan pasado por situaciones así y no se habrán visibilizado. La censura está en todos los países igual que las personas que atentan contra la libertad, da igual como seas, si te sales un mínimo de los cánones establecidos, puedes correr el riesgo de ser apartado, tachado y en este caso, eliminado.

  • ¿El algoritmo de la censura?

    ¿Quién dicta que está bien y que está mal?

    Existen empresas expresamente creadas para ello, tanto personas que revisan las imágenes, como máquinas que tienen un sistema diseñado específicamente para encontrar desnudos como es el caso de Algorithmia.

    Algorithmia utiliza un “bot” el cual puede detectar esos desnudos. ¿Pero cómo es posible? Se realizaron estudios donde se observaba piel humana y diferentes proporciones de esa piel para determinar el nivel de desnudo. Poco a poco han ido mejorando incluso a tener una eficacia en el 93%, pero siempre se les escapan cosas, la mente es subjetiva, pero la máquina no puede incluso fabricando un sistema en el cual el algoritmo imitase algunas acciones que realiza nuestro cerebro. De ahí a que se utilicen etiquetas relacionadas con el desnudo o la posibilidad de denunciar las publicaciones, un feedback para la empresa. Incluso con el mejor algoritmo creado existen problemas como con publicaciones de personas en bikini.

    Lo más llamativo es que la propia empresa dependiendo del cliente que contrate el algoritmo puede mover los niveles de censura desde el 0% al 100% por lo tanto, dependiendo del público al que vaya la aplicación subirá o bajará los niveles. Esas personas deciden que se puede considerar desnudo o no. En Twitter, por ejemplo, puedes subir cualquier imagen con un desnudo, no van a eliminarla mientras que en Instagram con solo un pezón ya es eliminada. Es quiere decir, que al final son las personas las que controlan, el algoritmo es solo una herramienta que les ayuda a llevar a cabo sus planes.

    Instagram ha llegado a unos niveles en los que incluso está censurando a hombres con pelo largo sin camiseta pensando que son mujeres enseñando el pecho. Esto podría ser un gran debate en el cual se puede ver perfectamente una sociedad sexista. Debido a este suceso, se creó una campaña por Amber Faust llamada #longhairedboyrevolution.

    Publicaciones de todos niños que reivindicaban sus fotografías en Instagram

    “Querido Instagram, soy un chico. Solo tengo el pelo largo. ¡Deja de borrar mis imágenes! #longhairedboyrevolution

    traducción de la publicación de instagram en la cuenta de Amber faust

    En estos momentos, también podría aparecer la idea de que por tener el pelo largo se consideraría mujer y tener el pelo corto hombre, cuando tanto el pelo, como la ropa, los juguetes, los colores, etc. no deberían tener género.

    Las personas trans (persona cuya identidad de género es diferente a la de su sexo asignado) e intersexuales, también luchas cada día por esta misma razón, la separación de géneros establecida por la sociedad donde se nos encasilla según los genitales con los que nacemos. Si una mujer trans en Instagram sube una foto enseñando pezones considerados “masculinos” se censuraría, pero si un hombre cis (persona cuya identidad de género es diferente a la de su sexo asignado) enseña sus pezones también “masculinos” no se censura.

    Por otra parte, y diferente a esto anterior, también existen algoritmos que cuanta más piel enseñes más popular te harás. Es decir, se hizo un estudio por La Red Europea de Periodismo de Datos, donde se dieron cuenta que si una mujer subía una publicación en bikini o ropa interior tenía un 52% más de posibilidades de aparecer a otros usuarios mientras que si haces lo mismo siendo hombre solo tendrías un 28% de que apareciera. También se observó que si se subía fotos de alimentos o paisajes tenía un 60% menos de que apareciera. Por lo tanto, llegando a una conclusión, se podría decir que se busca sexualizar a las mujeres, pero sin enseñarlo todo porque entonces se censura.

  • Artistas que reivindican

    Muchos y muchas artistas han querido reivindicar el cuerpo de la mujer para poder exponerlo en Instagram como arte en contra de la censura mediante la fotografía, el dibujo y otras técnicas. El hecho de desnudarse muchas veces para una mujer no es algo natural sino un acto de valentía, por las miradas, los comentarios o incluso por su propia salud mental. Y es un acto de valentía también porque desde pequeñas nos han enseñado a no mostrar nuestro cuerpo como algo normal sino como un tabú ante la sociedad.

    Antes de comenzar hablando de estos artistas querría resaltar que una mujer puede tener pechos o no, puede tener genitales femeninos o no independientemente del cuerpo biológico que siempre se ha expuesto como lo “normal”.

    Pedúnculus

    Pedúnculus no es un o una artista en sí, es un trabajo de fin de grado realizado por Carlota Sánchez Prats en 2017, el cual realiza una investigación sobre la censura de Instagram mediante la creación de una cuenta pública llamada @pedunculus01 donde empezó a subir fotografías sin censurar. El objetivo de este trabajo era realizar fotografías con desnudos parciales de mujeres, donde partes del cuerpo de las modelos eran tapadas con espejos y así intentar evitar que Instagram cerrase o denunciase la cuenta. Cada vez que le eliminaban una cuenta se hacia otra y la llamaba en orden, en este caso @pedunculus02, 03, 04… Finalmente, tras realizar todo el proyecto contó con ocho cuentas creadas, siete sin censura y una autocensurada para ver si esa no la eliminaban. En la ultima cuenta pudo subir hasta 21 fotografías debido a esa autocensura.

    Petra Collins

    Petra Collins (@petrafcollins) es una fotógrafa de retratos y de moda y diseñadora de moda de Toronto, Canadá. Su trabajo está relacionado con dar a conocer información sobre la pubertad, la menstruación o la masturbación.

    Ya por 2013 creó una discusión en internet subiendo a Instagram una fotografía suya mostrando vello púbico. Esta foto, que tenemos a nuestra izquierda, fue eliminada de la cuenta y Collins quiso reivindicar esto ya que ella decía que en ningún momento estaba infligiendo ningún término de la política Instagram. Tras este suceso, Collins habló abiertamente sobre todo lo que había sucedido desde que la subió hasta ahora y comentó que esa foto fue eliminada simplemente porque su cuerpo no encajaba en la sociedad estereotipada de la feminidad.

    Publicación de Petra Collins en Instagram

    Rupi kaur

    Rupi Kaur (@rupikaur_) es una poeta y artista pakistaní residente en Canadá actualmente. En Pakistán está muy mal visto la menstruación, se las condena de “impuras” y este tabú conforme crecen se va haciendo más y más grande incluso llegando sentirse tan mal por esta situación que dejan de asistir a la escuela. Rupi Kaur ante esta situación y siendo un gran foco de visibilidad quiso hacer algo al respecto, en 2015 realizó una serie de fotografías que posteriormente subiría a Instagram donde aparecía con toda naturalidad el sangrado menstrual y su día a día de como vivía esa realidad.

    Todo esto tuvo consecuencias, Instagram censuró su cuenta y le llegó muchas críticas ante esas fotografías. Eso solo la incentivó a crear una obra de arte mayor, una colección de poemas «Otras Maneras de Usar la Boca». Esto por ahora no ha sido censurado.

    «La próxima vez que él te señale que el vello en tus piernas  está creciendo, recuérdale que tu cuerpo no es su casa, él es solo un invitado que ya no es bienvenido»

    Otros artistas han buscado la manera de autocensurarse las propias fotografías de una manera sutil y artística para que Instagram no las elimine. Por ejemplo, Fabio Borquez (@fabioborquez), un fotógrafo alemán o Melissa Cartagena una fotógrafa brasileña utilizan programas de edición para tapar sutilmente las partes que más polémica podrían dar.

    Por supuesto existen muchos más artistas que siguen luchando contra la censura de Instagram como: Alvida Biström y Molly Soda (@arvidabystrom/@bloatedandalone4evr1993), Esmay Wagemans (@esmaywagemans) o Michele Bisaillon (@michel_e_b).

    Publicación de Arvida en Instagram
    Publicación del proyecto de Esmay «second skin» en Instagram
    Publicación de Michel en Instagram
  • ¡Tápate!

    El cuerpo femenino ha sido y sigue siendo actualmente un objeto sexualizado, erotizado y criticado por toda la sociedad. Para comprender un poco más desde cuando estamos hablando, hay que remontarse a la historia de Adán y Eva, en la cual se utilizó a la mujer como algo malo, seductor, que te lleva por el mal camino, frente al hombre el cual es sabio y sabe que no debe ser tentado.

    Por otra parte, desde un principio a la mujer se le ha marginado en la religión (pág 30)* de la forma más evidente posible, pero el desnudo no era un tema tan importante ya que se pintaban cuadros con mujeres amamantando a sus hijos o desnudas, donde incluso se consideraba un acto educativo.

    Aquí es perfectamente visible como la virgen está amamantando a Jesús, el cuadro es ‘La Sagrada Familia’. El Greco. Leche materna (1595)

    Pero un tiempo más tarde, la iglesia comenzó a generar ideas contrarias indicando el cuerpo de la mujer como algo erótico y sensual, un acto que se podía llegar a considerar pecado. El desnudarse indicaba una acción erótica y poco a poco se construyó el arte erótico que como consecuencia, a partir del siglo XVIII, las imágenes de pechos al desnudo comenzaron a considerarse pornográficas. Esta connotación construyó pensamientos negativos alrededor de la sociedad. Y de este modo se comenzó a censurar todo tipo de ilustraciones con desnudos y pintando encima de ellos ropa. La mujer como Tomás de Aquino nombró, eran úteros en su totalidad, solo servía para la maternidad.

    Posteriormente, la fotografía artística (pág 33)* estableció al cuerpo femenino en un sentido erótico, mediante la fotografía del desnudo. Este concepto de erotismo aún cosificó más el cuerpo de la mujer integrándose en la categoría pornográfica. Pero, en contraposición, aparecieron mujeres fotógrafas que comenzaron, a través de la fotografía, a atribuirse el feminismo a través de la fotografía utilizando a las mujeres como objeto. En este caso Gertrude Kasebier fue la primera mujer fotógrafa en enseñar al mundo este tipo de arte: la liberación de la mujer, la cosificación de su cuerpo con los corsés y otras vestimentas. Se hacían en espacios domésticos para llamar más la atención, siempre en ausencia de los hombres. Gracias a Gertrude Kasebier la fotografía comenzó a ser una carrera un poco mejor vista para el ámbito femenino.

    Adentrándonos ya en la actualidad, el auge de las redes sociales ha generado gran controversia, han ayudado en cierta parte a la construcción del discurso del cuerpo femenino, a liberarlo, a disminuir el tabú que existe con él y todo esto de forma irónica deconstruyéndonos nosotros, deconstruyendo esas ideas que desde pequeños nos han enseñado y que muchas veces no todo lo que nos construye está bien. Existe gran cantidad de información que todos los días nos llega desde una punta del mundo u otra y hace que estemos más conectados, generando así grandes cambios con la construcción social y cultural de las personas.

    Pero no todo lo que las redes sociales han traído ha sido de forma positiva. Centrándonos en la aplicación Instagram ha construido un mundo en el cual solo eres popular según los likes o los seguidores que tengas. Además, se ha ocupado de censurar el desnudo femenino metiéndolo dentro de la categoría de “sexualizado”, sin ver la naturalidad del cuerpo, de la anatomía del ser humano y no solo eso, sino también todo lo relacionado con la menstruación y el vello corporal, pero solo del cuerpo femenino. Es decir, un hombre perfectamente puede subir una fotografía de él enseñando pectorales y otras partes del cuerpo sin ser censuradas. Por lo tanto, ¿en qué momento un pezón de una mujer es diferente al de un hombre? ¿por qué no se sexualiza de la misma forma a los dos cuerpos? A raíz del revuelo de los pezones femeninos la gente se movió y surgió una campaña llamada Free the nipple (pág 48)* o #freethenipple. (pág 9)*. Aun luchando contra esta injusticia, hoy en día Instagram sigue censurándolo.

    Yellow Mellow fue una de las influencias más visibles en España con su foto, que tenemos a nuestra izquierda, publicada tan llamativa y sin pelos en la lengua. Junto a su expareja, Oh!Mamiblue y Jonan, hicieron esta foto que dio que hablar durante mucho tiempo. Spoiler: fue censurada más tarde.

    Tras esta campaña, muchos artistas comenzaron a hacer arte publicando fotografías o dibujos que pudiesen ir en contra de lo que Instagram tachaba de correcto.

    Esta red social se escuda dentro de sus propias políticas de uso de la aplicación, diciendo que hay contenido que no puede distribuirse debido a la diversidad de audiencia que hace uso de la aplicación (las personas a partir de los 13 años ya pueden hacer uso de ella). No se puede publicar ningún contenido relacionado con la alusión de la violencia, el desnudo, ni relaciones sexuales, exceptuando en este caso, mastectomías, desnudos en pintura y mujeres dando de mamar. Pero aun haciendo estas excepciones, muchas obras artísticas han sido censuradas y esto puede llegar a considerarse un ataque directo a la libertad de expresión.

    Estos artistas que han luchado para que el desnudo del cuerpo femenino tenga una cabida en Instagram también pecan de algo, evidentemente no todos, pero la mayoría, y es que los cuerpos que publican suelen estar dentro de los cánones de belleza preestablecidos, cuerpos que podrían llamarse “agradables a la vista”. Según un estudio realizado por Daniela Liévano Ortegón (pág 127)*, investigó el tipo de cuerpo que se exponía en las redes sociales y se dieron cuenta que la mayor parte de esos cuerpos son el estereotipo perfecto de una sociedad occidental. A estos perfiles los llamaron pieles de porcelana, es decir, delgadas, blancas, con piel lisa, con pechos perfectos, etc. Por supuesto, como anteriormente se ha comentado, no todas las cuentas de Instagram tienen este perfil, cada vez la gente se suma más a esta iniciativa de cambiar los estereotipos y los cánones de belleza y que mejor cambio que reivindicando nuestros derechos.

    * La página señalada es aquella donde se encuentra la información en el documento original.

    Enlaces usados:

    https://moovemag.com/2015/08/la-personalisima-fotografia-de-gertrude-kasebier/

    http://escribiendodearte.blogspot.com/2013/04/la-virgen-de-la-buena-leche-el-greco.html

    https://www.instagram.com/freethenipple/?hl=es

    https://repository.javeriana.edu.co/bitstream/handle/10554/36058/LIEVANO_DANIELA.pdf?sequence=4&isAllowed=y

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